Los Exonerados Políticos de la UTE Viven y la pelean

¡VIVAN LOS QUERIDOS EXONERADOS POLITICOS DE LA UTE!

Los Exonerado(a)s Político(a)s de la UTE, acaban de dar una prueba de que están vivito(a)s, coleando y peleando.

Vaya nuestro agradecimiento a Felipe Chiang y a Ángel Pizarro por su saludo y colaboración a la reflexión que debe hacer todo miembro de la Universidad Técnica del Estado, casa de estudios superior que la dictadura y la derecha asesinaron, y descuartizaron, por abrir sus puertas a los trabajadores, por formar profesionales comprometidos con el pueblo chileno y con la causa superior de la patria como es erradicar la pobreza.

SALUDOS AL BLOG Y A LA PAGINA WEB DE LA UTE

La Asociación de Académicos Exonerados Políticos de la Universidad Técnica del Estado, saludan muy fraternalmente al equipo que concibió y organizó el sitio Web destinado a rescatar las experiencias de la UTE.
Además, felicitan al equipo por la valiosa contribución que han hecho y están haciendo por rescatar la historia de nuestra Universidad a través de los documentos, testimonios, libros imágenes, personajes y otros, lo que realmente está mostrándonos lo que ustedes muy bien expresan: LA UTE VIVE.



Junto con hacerles llegar nuestro saludo y felicitaciones les deseamos mucho éxito y nos comprometemos a colaborar en el logro de sus aspiraciones.



Aportes de la Universidad Técnica del Estado (UTE) a la teoría y práctica de la Universidad chilena
Asociación de Académicos
Exonerados Políticos de la UTE

No por nostalgia ni por la aspiración a reproducir en condiciones históricas tan distintas, la original y creadora experiencia de la UTE, en el período agosto de 1967 al 11 de septiembre de 1973, sino por el deber profesional y ciudadano de iluminar un trozo de la historia de nuestra Universidad que se mantiene en penumbras, período inserto en nuestra historia republicana, que el Diputado socialista Mario Palestro caracterizó a su regreso del exilio, “como el más luminoso de la historia de Chile”, visión que compartimos.



En este breve lapso culminaron cien años de desarrollo social, económico y cultural y definiciones conceptuales en los planos ideológico y político que tuvieron su correlato en todas las instituciones y particularmente en el mundo universitario. Esto es especialmente válido en el caso de la UTE, que asumió un proyecto de reforma concordante con el proyecto-país de la época, proyecto histórico de acuerdo con el lenguaje de su tiempo, para la creación de las bases de una nueva sociedad en la vía no-capitalista de desarrollo, noción que venía perfilándose, definiéndose y legitimándose, desde mediados del Siglo XIX, en amplios sectores promovidos por un poderoso movimiento social en que participaban mancomunadamente obreros, empleados, estudiantes, intelectuales y artistas, noción que la Dictadura no logró erradicar del corazón y de la conciencia ciudadana.



La Reforma Universitaria en Chile y en América Latina, tiene sus raíces en el Grito de Córdova (Manifiesto, 21/06/1918), que fue incubado por sucesivas generaciones, lo que eclosionó a fines de la década del 60 inducido por la efervescencia social en el Continente y por la movilización revolucionaria de la juventud y de los estudiantes a nivel planetario.

La Reforma de la UTE, debe analizarse en el marco del proceso histórico que vivía nuestra nación, que se proponía remover los obstáculos para el desarrollo del país y la generación de los fundamentos sociales, económicos y culturales necesarios para la realización de las aspiraciones de libertad, justicia, solidaridad, fraternidad, en suma, la democracia plena.



En la UTE, la FEUT (Federación de Estudiantes de la Universidad Técnica del Estado) había definido su programa en tres grandes aspectos, desde comienzos de la década del 60. Los objetivos mayores e inclusivos eran: eliminar la “vallas”, a) económica -presupuesto precario-, b) académica –bajo nivel magisterial- y, c) burocrática- democratización.

La concordancia entre el proyecto de reforma universitaria en general, y el de la UTE, con el proyecto-país, en particular, originó condiciones positivas para las aspiraciones universitarias.

La UTE, especialmente, como la más dinámica e innovadora en la realización del proyecto-país en el plano de su competencia, gozó de especial estimación y aprecio por parte del Gobierno y del Presidente, Dr. Salvador Allende, que la distinguió con la asignación de importantes misiones, que esperamos analizar con la colaboración de los que participaron en esa etapa tan significativa de nuestro país y de nuestra universidad.



El Estatuto de la UTE, elaborado por toda la comunidad y adoptado en un Congreso, con representación de todos los estamentos de las Sedes y Sub-sedes, fue promulgado por el Dr. Allende, sin objeciones ni enmiendas, ni del Gobierno, ni del Parlamento en una señal de respeto a la voluntad universitaria expresada democráticamente.

La UTE, recibió también la consagración legal de su “Comunidad Universitaria”, integrada por profesores, funcionarios y estudiantes, con plenos poderes y autonomía para decidir y gestionar colectivamente los asuntos institucionales.



El Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 frustró la realización de un bello proyecto de Facultad de la Salud para formar médicos y personal de salud de origen popular para atender al mundo poblacional, que tendría su sede en el Hospital que se construía en Ochagavia, y que el S. Gobierno le confiaría en señal de confianza en sus capacidades y compromiso.



Una señal suprema de este aprecio y concepto que tenía el Dr. Allende por la UTE, es que había fijado el martes 11 de septiembre de 1973, para visitar la Universidad Técnica del Estado (UTE) e informar al país, desde esta tribuna, la decisión del S. Gobierno de plebiscitar o llamar a referéndum aquellos asuntos que la oposición reclamaba. Bueno es recordarlo ahora que nos preparamos para conmemorar el centenario de su natalicio.

Ángel Pizarro.
Santiago, 28 de abril de 2008.