Señor Rector de la Universidad de Santiago de Chile
Autoridades de la Universidad de Santiago
Señora Inés Erazo viuda de Kirberg y familia de don Enrique Kirberg
Señor Alcalde y Señores Concejales de la Ilustre Municipalidad de Estación Central
Señor Presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago
Señor Presidente de la Asociación de Funcionarios de la Universidad de Santiago
Autoridades presentes
Señores ex-presidentes de la Federación de Estudiantes de la Universidad Técnica del Estado FEUT
Señores ex –autoridades de la Universidad Técnica del Estado
Comunidad universitaria
Miembros de la Corporación UTE – Usach:
Es para la Corporación UTE-Usach, motivo de alegría y del más profundo orgullo, ver que este 25 de mayo, se hizo realidad una de las tareas que nos habíamos propuesto.
Esto, en el contexto de la misión que hemos definido para nuestra corporación, de custodiar y mantener viva la memoria histórica de nuestra querida casa de estudios, la Universidad Técnica del Estado y la continuadora de su labor, la Universidad de Santiago de Chile .
Es así como hoy venimos, en conjunto con la comunidad universitaria toda y con los vecinos del municipio Estación Central, representado en sus autoridades, en rendir este pequeño pero significativo homenaje, a quién fuera nuestro querido rector, don Enrique Kirberg Baltianski.
Se rebautiza con su nombre la avenida de acceso a la Casa Central de la Usach, decisión refrendada por la unanimidad de los concejales de este municipio.
Agradecemos a las autoridades de la comuna de Estación Central, la acogida dada a la petición que al respecto hizo la Rectoría de la Usach, de la cual hemos sido entusiastas co-patrocinadores en conjunto con la Federación de Estudiantes de esta casa de estudios.
Nuestra Corporación UTE-Usach, ha querido dar aún mayor realce a este gesto mediante la inauguración de un monolito en honor de Enrique Kirberg, ubicado en el frontis de esta Casa Central.
Fue don Enrique Kirberg, en su juventud, un destacado estudiante, en su adultez, un profesional prestigioso, en su madurez, un académico brillante.
Padre ejemplar, forma una familia, presente en este acto, que tiene plenos motivos para sentirse orgullosa de su legado.
En su juventud, es Fundador de la FEMICH, Federación de Estudiantes Mineros e Industriales de Chile, que incorporó a las escuelas de minas y técnicas superiores dispersas a través del país, existentes en la época.
Es uno de sus preclaros dirigentes y a través de esta organización, impulsa la lucha por la creación y formación de la Universidad Técnica, que se originó como resultado de esta brega, sobre la base de dichas escuelas.
Una vez graduado de la entonces Escuela de Ingenieros Industriales, ejerce la ingeniería de manera destacada, formando una prestigiosa empresa, de cuyas obras aún hoy podemos ser testigos, entre las más notorias, la iluminación del Estadio Nacional, aún en servicio en la actualidad.
Comparte su labor en la ingeniería, reservando algunas horas de su tiempo para impartir la docencia en la Escuela de Ingenieros Industriales, transmitiendo a sus alumnos, las ricas experiencias adquiridas en el ejercicio profesional.
Pero Enrique Kirberg, no sólo es un profesional exitoso, sino que es un hombre de sólidos principios, comprometido con su pueblo y sus luchas, lo que lo hace aceptar sin vacilaciones, cuando en 1968, se solicita su concurso para presentar su candidatura a la Rectoría de la UTE, en la primera elección, con participación en votación universal de toda la comunidad, en una universidad chilena.
Con la modestia que lo caracteriza, Don Enrique no cree poder ser electo. Pero no duda en dejar de lado su exitosa empresa, para emprender esta tarea no exenta de sacrificios, para la cual es solicitado.
Pero contra su pronóstico, la comunidad estima que él es el más idóneo para encabezar esta nueva etapa, en lo cual es fundamental la abrumadora mayoría que consigue en el estamento estudiantil, lo que se repite como una constante en las posteriores elecciones de 1969 y 1972.
Durante su gestión, Enrique Kirberg encabeza los esfuerzos por construir esta nueva universidad, democrática, crítica, a tono con los tiempos y comprometida con la sociedad, que se ha propuesto como tarea del proceso de Reforma Universitaria, en curso acelerado por aquella época.
Así es como la UTE, pasa de ser una universidad anquilosada (el patio trasero de la enseñanza superior), a ser una universidad de primera línea.
Durante su rectoría, la UTE se abre al mundo y a la sociedad.
Prestigiosos académicos se incorporan a su quehacer.
Se incentiva notablemente la extensión y la investigación, ambas anteriormente, con una cobertura exigua en la labor universitaria.
Enrique Kirberg, ve con claridad la necesidad ingente que tiene el al país de contar con los técnicos superiores de excelencia que tanto requiere, y el deber de la universidad de satisfacer el anhelo de los jóvenes por conseguir una educación digna y al alcance de todos.
La Universidad Para Todos, se hace realidad a través del Plan Kirberg, por el cual la UTE, que a través de sus Institutos Tecnológicos, llega a cubrir los más diversos rincones de la patria.
No es ajeno a este afán, el Convenio CUT-UTE, por medio del cual se logra que miles de trabajadores puedan completar su enseñanza media y acceder a la universidad.
La UTE es una universidad nacional, con cobertura a través de todo el territorio.
Chile se llena de sedes y subsedes de la UTE.
En lo interno, la universidad, sus facultades y departamentos, están en permanente renovación, sus autoridades son elegidas de manera democrática, en votación universal de todos los estamentos, con participación plena de la comunidad en las decisiones que se toman.
Es extraordinariamente significativo, que este acto se lleve a cabo en esta fecha 25 de Mayo de 2011, cuando se cumplen 50 años, de aquella Declaración visionaria del 25 de Mayo de 1961, que se considera como el comienzo del movimiento por la Reforma Universitaria en la UTE, el mismo que desemboca años más tarde, en la elección de don Enrique Kirberg Baltianski, como el primer Rector elegido democráticamente en votación universal por la comunidad universitaria.
La gestión de don Enrique fue interrumpida de manera brutal en aquel aciago Septiembre de 1973, tras lo cual sufrió prisión y destierro.
Aquella UTE, cuya construcción él encabezó, sería desmembrada y atomizada en los años 80, sin embargo quienes fuimos partícipes de ese proceso, continuamos sintiendo el orgullo de lo que llegó a ser la UTE.
La Universidad que nos dio cobijo bajo su gestión, tenía una dedicación preponderante a los sectores más desposeídos y de raigambre popular.
Esto permitió que muchos de sus hijos hayamos obtenido acceso a metas, que anteriormente sólo eran sueño, al encontrar cobijo en la UTE, la cual no sólo nos brindó educación pública, sino que educación pública de calidad.
Así fue como don Enrique lideró la lucha, que sí lo fue, por conseguir presupuestos del estado que permitieran a la UTE, desarrollarse en plenitud, en conformidad con lo que la sociedad chilena exigía de ella.
Hoy en día, vemos como las universidades chilenas se ven estranguladas en su quehacer por la falta de recursos y el afán mercantilista.
Debemos por tanto, siguiendo las enseñanzas de Enrique Kirberg, perseverar y hacer enconados esfuerzos, en la noble tarea de defensa de la educación superior pública de calidad, contra los embates de aquellos que piensan que la educación es sólo un negocio.
Confiamos en que este legado está siendo continuado por la USACH, en su afán de construir una universidad pública democrática, pluralista y de excelencia.
La visión y legado de Enrique Kirberg, es hoy plenamente vigente y confiamos que su nombre en esta calle y el monolito que inauguramos en su honor, lo mantenga presente para las nuevas generaciones.
SERGIO MOSCOSO
PRESIDENTE CORPORACION UTE USACH
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