JUAN VERA RECUERDA COMO REUNIÓ A ENRIQUE KIRBERG, A LINUS PAULING Y A RUBEN TORO EN EEUU Y EN CHILE

El mensaje de Poncho Grau me dejó pensando. Minutos antes había
visto la foto que pusiste en la portada del sitio UTE donde aparece
Don Enrique Kirberg caminando con Linus Pauling por el campus de la UTE.

De verdad a los 73 años, yo debiera sentarme a escribir memorias en
vez de llevármelas conmigo.

Comienzo ahora con un recuerdo de un llamado por teléfono de Don
Rubén Toro a mi casa en Berkeley, California, donde yo estaba
haciendo estudios de Postgrado en 1969. Don Rubén me había
convencido de ir a Berkeley y dejar el cargo de Director de la EII
que yo habia aceptado, a instancias de Don Rubén, a la salida de
Armando Quezada.

Bueno, Don Rubén al teléfono: " Juan, estoy en Washington con
Enrique Kirberg y queremos que nos consiga una visita a Linus
Pauling para invitarlo a ir a Chile. Si, Linus Pauling trabaja en
Stanford. Esto queda en Palo Alto, un poco al sur de San Francisco.
Lo llamaré de vuelta el fin de semana para saber como le ha ido."

No voy a entrar en detalles pero después de varios llamados por
teléfono y una visita personal a Linus Pauling, en su pequeña
oficina repleta de libros, conseguí la cita. Ahí llegaron Don Rubén
y Don Enrique a San Francisco. Comimos una noche en mi pequeño
departamento de estudiante en Berkeley y al otro día, a las 7 de la
mañana, los pase a buscar al hotel para ir a visitar a Linus
Pauling. El resto, puede verse en la foto.



Este era Don Rubén. Cuando volví a Chile en 1970, se encargó de
volverme a la dirección de la EII y luego hacer toda la campaña
para hacerme elegir como primer Decano de la Facultad de Ingeniería.
De verdad, que mi vida hubiera sido muy distinta sin la influencia
de Don Rubén Toro.

Otra pequeña historia que muestra la dimensión personal de Rubén
Toro. En algún momento, quizás cuando yo era Presidente del Centro
de Alumnos de la EII (o quizás después), se me ocurrió que los
Ingenieros Químicos y quizás también los Ingenieros Matalúrgicos no
necesitaban Mecánica Racional para nada. Que si era por la formacion
matemática que se obtenía de la Mecanica Racional esta podía
obtenerse con mucho mas provecho estudiando Fenómenos de Transporte.
Le hablé a Don ruben y con su calma de siempre me dijo: "Paseme un
buen texto y dejeme pensarlo." Así lo hice sin muchas esperanzas de
que fuera a aceptarlo. Para mi sorpresa me llamó después de unos
pocos días para decirme que estaba completamente de acuerdo. Y así se hizo!

Como todos sabemos, Mecánica Racional era el hobby de Don Rubén.
Cómo quisiera poder emularlo en su juventud mental y amplitud de miras.

Juan H. Vera